la puerta del auto se abre
deja paso a la niebla
se esparcen restos de cenizas
el pájaro en lo alto del árbol
resplandece como la sombra
de una imagen que fue borrada
ahora todas las noches convergen
ahora la plata y el oro de mi mente
danzan sobre el asfalto virgen
una música como de ruedas vibrando
un fragor de mil niños en la fiesta de fin de curso
es el final de la larga espera
los pasos van cayendo de muy arriba
la leyenda negra siembra los campos
banderas de réplica en las ventanas
de edificios que devoran la nada
juega
el mantel del desafío se postra ante ti
la cena está servida